Por Martín G. Iglesias
Desde hace tres décadas, los llamados rellenos sanitarios dejaron de ser efectivos y los expertos concluyen que al menos hay tres daños irreversibles: las toxinas, los lixiviados y los gases de efecto invernadero; los desechos orgánicos producen bacterias que descomponen la basura; la basura en descomposición produce sustancias químicas ácidas débiles que se combinan con los líquidos de los desechos para formar lixiviados y gases tóxicos.
Hoy, esas consecuencias la vivimos en Cancún, donde ya van tres rellenos sanitarios que colapsan porque no son instalados con la normatividad que señalan las autoridades medioambientales, aunado a la corrupción de los gobiernos en turnos y las empresas concesionarias.
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Desesperados por esa situación, ayer la presidente municipal de Benito Juárez (Cancún) Ana Patricia Peralta de la Peña, anunció que “pronto” darán a conocer la convocatoria para otorgar una nueva concesión para la recolección, transportación y disposición final de la basura, donde sea dicha empresa la encargada de hacer todo, o sea, desde la compra del terreno hasta la construcción de la infraestructura.
Mismo caso el de Isla Mujeres y Puerto Morelos, donde cada uno de estos municipios realizará dentro de su territorio la disposición final de los residuos sólidos. Lógico, serán avalados por la Secretaría del Medio Ambiente de Quintana Roo que finalmente supervisará que las empresas concesionarias, encargadas del manejo de basura, estén operando correctamente en los demás municipios.
Mientras en Quintana Roo continúan con prácticas de los 90, en estados como Nuevo León y otros países, lo nuevo es la aplicación de la termovalorización; técnica que es más que solo incinerar la basura, es aprovechar el calor que se puede obtener de los residuos inorgánicos para obtener, por ejemplo, energía eléctrica. Este proceso es comúnmente conocido como Waste to Energy, que se traduce literalmente como “de residuo a energía”.
Este procedimiento fue aplicado por primera vez en Quintana Roo en 2018, cuando el entonces presidente municipal de Lázaro Cárdenas, Josué Nivardo Mena Villanueva, limpió el centro de transferencia de Holbox, hecho que fue criticado por muchos políticos sin visión y hasta fue acusado de “ecocida”. Lo investigaron todas las dependencias de medio ambiente nacional y estatal y hasta la Marina, porque decían que había enterrado la basura.
El tiempo le dio la razón Nivardo Mena, porque la basura de Holbox no fue enterrada, fue termovalorizada, y quedó limpio el Centro de transferencia. Hoy las toneladas de basura no solo dañan el medio ambiente en la isla, sino que la imagen es desagradable.
No cabe duda de que los ciudadanos debemos de participar desde la separación de los residuos en nuestra casa; dejar de utilizar plástico de un solo uso; reutilizar lo más posible los recursos. Así como la autoridad debe de brindar las facilidades para el reciclaje. Porque la contaminación por desechos es un asunto de todos. Al tiempo…
SASCAB
Resulta que la sala regional Xalapa del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), le corrigió la plana al Tribunal Electoral de Quintana Roo (TEQROO), pues los magistrados determinaron que el morenista Luis Gamero Barranco, no podrá competir por ningún cargo de elección popular, pues sigue impedido por haber cometido Violencia Política contra la Mujer en Razón de Género (VPMRG).
Además, seguirá inscrito en el registro Nacional y Estatal de Personas Sancionadas por Violencia Política contra la Mujer en Razón de Género hasta el 20 septiembre del 2026. Así que Gamero se quedará con las ganas de ser diputado local o federal. Ahí se las dejo…