Francisco Javier Robles / NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- La destrucción y abandono de los mausoleos es total en los dos principales cementerios públicos de Cancún (Panteón Municipal y Los Olivos ) y se pueden encontrar tumbas en ruinas, totalmente abiertas; féretros expuestos con osamentas a la intemperie, capillas saqueadas y vandalizadas, y hasta rastros de brujería y rituales extraños
Según los cuidadores, las fuertes lluvias y fenómenos meteorológicos del año pasado contribuyeron en gran medida a la exagerada devastación de sepulcros que ahora tenemos.
Muchos ciudadanos lo atribuyen al año y medio de “suspensión de actividades no esenciales” por la emergencia sanitaria provocada por la pandemia, y algunos otros, a que las personas se olvidan de sus familiares y amigos difuntos, y los dejan en abandono.
“Nosotros suspendimos las visitas desde que empezó la pandemia; tiene dos años prácticamente que no pisábamos el panteón, y sí, nos encontramos con un caos por todos lados”, señaló Karla Guadalupe.
Además de los malos olores, otra de las problemáticas con las que se enfrentan los visitantes, es la falta de espacios para caminar, pues los pasillos desaparecieron en su totalidad por el exceso de sepulturas que aparecieron, tras la embestida del Covid-19.