Que los amigos del magistrado Carlos Lima, ya ni le piden en los desayunos picadas, bombas de frijol con queso o cafés lecheros.
Y es que el magistrado del TSJ ya está algo saturado de los desayunos veracruzanos.
Se le ve mucho por avenida Cuauhtémoc, en Xalapa-Enríquez.
De hecho, en los últimos días se le ha visto más.
En una de esas lo nombran xalapeño distinguido.