Por Guadalupe Villarreal/NOTICARIBE PENINSULAR
CANCÚN.- Monseñor Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, obispo diocesano de la Diócesis Cancún-Chetumal aseguró que el regreso a las misas con la “Nueva Normalidad” ha sido muy responsable, pero con baja afluencia de feligreses.
También, explicó que para mantener el orden y la capacidad del 30% del aforo que marca el semáforo Naranja, se realiza un ingreso ordenado entre feligreses a la iglesia, con el distanciamiento social entre personas.
“Nos damos cuenta que las personas de verdad se están quedando en casa, se están cuidando”, señaló en rueda de prensa este domingo.
Asimismo, comentó que pese a que se reanudaron las misas presenciales, también una mínima parte de las iglesias de Benito Juárez (Cancún) regresarán debido a la falta de insumos para desinfectar, así como para cubrir los filtros sanitarios para los feligreses.
Por otro lado, monseñor subrayó que la pandemia ha dejado un panorama desolador debido a la falta de empleo que miles de ciudadanos están pasando.
“Se puede desatar la violencia, los robos, por la cantidad de personas que viven en Cancún por pandemia”, apuntó.
Finalmente, destacó que las fiestas patronales, primeras comuniones, bodas y bautizos se estarán reagendando y celebrando pero de manera privada y únicamente con padrinos, extremando todas las medidas sanitarias.