Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
SANTA LUCÍA.- Las labores del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en Santa Lucía, Estado de México, se incrementaron de manera exponencial, toda vez que ya han sido encontrados en la zona restos de más de 60 mamuts, algo que no estaba previsto por los expertos.
“El principal reto ha sido que precisamente la riqueza de fauna y de vestigios ha sido mayor a la que teníamos considerada. Llevamos arriba de seis decenas de mamuts, casi todos son de la variedad columbi, mamut colombiano, y otro tipo de fauna asociada al pleistoceno, como bisonte, algo de camello, un poco de caballo”, reveló a La Razón el coordinador nacional de Antropología del INAH, Pedro Francisco Sánchez Nava.
Al inicio de las labores del instituto, el 9 de abril de 2019, el experto dijo a este rotativo que por la zona, ubicada en lo que fue el lago de Xaltocan, se tenía la certeza de hallar fauna pleistocénica que data de 35 mil años antes de Cristo y hasta la época mexica; sin embargo, no imaginaron la cantidad de mamuts que iban a encontrar.
En aquel entonces se puso a cargo del proyecto a tres arqueólogos, cada uno con doce asistentes; “actualmente están trabajando 31 arqueólogos, cada uno con su equipo, además de tres restauradores”.
Sánchez Nava reconoció que las labores arqueológicas también han hecho más lentos los trabajos para edificar la nueva terminal aérea, aunque descartó que ello impida concluirlo en tiempo y forma.
“Decir que no hemos incidido en la realización de la obra es mentir; nuestro trabajo es mucho más lento y muy minucioso, pero estamos trabajando de manera coordinada con los responsables de la obra. Claro que para ellos siempre significa si no un retroceso, sí un espacio en el que no pueden trabajar a un ritmo avanzado; aún así estamos en condiciones de continuar a nuestro ritmo sin incidir demasiado en los tiempos de la obra”, indicó.
“Llevamos arriba de seis decenas de mamuts, casi todos son de la variedad columbi, y otro tipo de fauna asociada al pleistoceno, como bisonte, algo de camello, un poco de caballo”, destacó Pedro Francisco Sánchez Nava, Coordinador nacional de Antropología del INAH
La encomienda del INAH, resaltó, fue realizar los estudios de factibilidad en la zona para dar luz verde a la obra.
“Si hubiésemos encontrado un vestigio arqueológico que fuese inamovible, como una pirámide, o que no fuera susceptible de exploración y salvamento arqueológico pues hubiera tenido que ser también del conocimiento de los proyectistas para poder hacer los cambios pertinentes en la obra, pero en este caso, todos los vestigios hallados han sido susceptibles de exploración y de salvamento arqueológico”, destacó.
El dato: La obra suma 215 días de construcción y tiene un avance físico del 18.1 por ciento, y se avanza conforme a lo programado, detalló ayer la Sedena.
Además de la fauna, “también hemos recuperado 15 osamentas humanas, o sea, entierros prehispánicos, vasijas, obsidiana, y un cánido, un perrito prehispánico que también estaba enterrado a manera de ofrenda”.
Sostuvo que el proyecto para integrar todos los vestigios a una galería, que sería abierta en la instalación aeroportuaria, sigue en pie.
“Un museo que cuente cómo fue el desarrollo de todo ese espacio hasta la época más reciente, reconstruir toda la historia regional, para que los visitantes tengan la oportunidad de conocer cómo fue ese lugar durante más de 35 mil años”, concluyó.