Agencias
CANCÚN.- De nueva cuenta, el Centro de Reinserción Social (Cereso) de Cancún, se encuentra envuelto en el escándalo, que involucra una ejecución al interior y en el de Chetumal hasta con amenazas directas lanzadas por internos, en contra del fiscal Oscar Montes de Oca Rosales y el ex secretario de seguridad pública, Jesús Alberto Capella Ibarra.
El operativo “sorpresa” realizado la noche del martes en el Cereso de Cancún, confirma una vez más como los internos son avisados de los operativos que se van a realizar, y tienen tiempo de esconder armas y drogas que hay al interior del penal.
Lo encontrado por las autoridades, es llamado por los propios internos y policías, “basura”, pues no es nada comparado con lo que circula allá dentro.
Apenas han pasado poco más de 100 días de la actual administración estatal, y en el Cereso de Cancún ya se ha cometido una ejecución por un ajuste de cuentas y un doble “levantón” al exterior.
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Primero, una mujer y un jovencito de 17 años de edad, fueron privados de su libertad por un comando armado, cuando salían del Cereso.
Era día de visita y acudieron al Cereso a visitar a Oscar Melchor D. C. (a) “El 18”, quien se encuentra preso al estar relacionado con varios homicidios, como líder de una célula delictiva.
Recientemente, un interno identificado como Ángel Alejandro A. R., fue encontrado sin vida al interior del Cereso, en la celda número 18 del área de visitas conyugales.
Lo estrangularon y luego lo colgaron para querer aparentar un suicidio, pero al finalizar, otro interno confesó haberlo matado como un “ajuste de cuentas”.
Se trata de José Laureano C. C., integrante de la peligrosa banda “Los Sureños”, quien se ha escapado dos veces..!del Cereso y está preso por haber participado en la múltiple ejecución del bar “Castillo del Mar”.
“El Chicanito” confesó haber asesinado al otro interno como un ajuste de cuentas, pues este último se quedó con droga que no reportó y debía venderse al interior.
Nada ha dicho la Fiscalía General del Estado (FGE) en torno a este caso, así como tampoco dijo nada de la doble privación ocurrida afuera del penal.
Estos dos casos son los que volvieron a prender las “alarmas” y la reacción de las autoridades fue un simple operativo de revisión, que arrojó como resultado el aseguramiento de “basura”.
Ahora, han llegado 12 internos más al Cereso, considerados también de alta peligrosidad y la sobrepoblación se va haciendo cada vez mayor en el penal, que desde siempre, ha sido un “polvorín”.
Y por si fuera poco a todo eso, en el Cereso de Chetumal, se suma el hecho de que varios internos de alta peligrosidad, por fungir como sicarios en grupos delictivos, expresaron su “apoyo” al empresario Carlos Mimenza.
En videos que el mismo se encargó de distribuir, Carlos Mimenza lanzó amenazas directas contra el fiscal Oscar Montes de Oca Rosales y el ex secretario de seguridad pública, Jesús Alberto Capella Ibarra.
Y en las imágenes, Mimenza presenta a varios reos que a cuadro, le reafirman su lealtad y apoyo, todos considerados de alta peligrosidad pues están presos por varios homicidios.
Frente a todo este panorama el Cereso de Cancún se muestra una vez más con un férreo autocontrol interno con graves acciones hasta ahora sin freno.
Con información de Red Informativa del Sureste