Redacción/NOTICARIBE PENINSULAR
CIUDAD DE MÉXICO.- Los estragos económicos de la crisis sanitaria derivada del COVID-19 han sido amortiguados de alguna forma por algunos fondos, sin embargo, para el próximo año se dejará de contar con uno de estos que ha ayudado a enfrentar las consecuencias financieras en el país. Así lo aseveró Arturo Herrera Gutiérrez, titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
El funcionario federal advirtió que en 202O se terminarán «los guardaditos» con los que cuenta la economía de México, lo que presentará un escenario complicado. En este sentido, refirió que en los próximos meses que restan del año se van a utilizar los recursos de estas partidas para impulsar la economía.
De esta forma, advirtió, durante el transcurso del año siguiente se dejará de contar con los fondos de Estabilización de los Ingresos de los estados y los de Estabilización de los Ingresos presupuestales.
Los otros dos pilares en los que se apoya el gobierno federal ante los estragos monetarios del COVID-19 son las coberturas del precio del petróleo y los fondos para los choques económicos, precisó Herrera Gutiérrez.
En el primero de los casos, apuntó, también habrá complicaciones. Esto debido a que para 2021 serán 22 por ciento menores que las registradas este año.
Una de las muestras del impacto económico de la crisis sanitaria es que el Presupuesto de Egresos del próximo año contempla menos recursos de los que se destinaron para 2020. El secretario de Hacienda advirtió que, a más tardar el próximo 8 de septiembre, se presentará en la Cámara de Diputados un proyecto «cuidadoso, prudente y muy responsable» que requerirá «la comprensión y la solidaridad de muchos».
Por otro lado, sostuvo que la valuación de la deuda de México se incrementará porque ésta se solicitó en otra divisa. Entonces, sin importar que el gobierno federal no incrementó la cifra por este concepto para hacerle frente a la crisis económica, se tendrán efectos en este tema que profundizará la difícil situación en el país.
Herrera Gutiérrez estimó que la deuda crecerá entre 8 y 10 por ciento del PIB, lo que obligará a las autoridades de la SHCP y el gobierno federal a «poner a la economía en una trayectoria descendente». GA
Con información de Eje Central