La visita de Claudia Sheinbaum y Mario Delgado a Quintana Roo no sólo significó “fichajes” y algarabía, sino que también, la coordinadora de los Comités de Defensa de la 4T y el presidente nacional de Morena, delinearon a los aspirantes las reglas en cuanto a las encuestas y, sobre todo, a quienes buscan la reelección.
Palabras más, palabras menos, Sheinbaum y Delgado deslizaron que los alcaldes que ya no cuenten con el respaldo popular, es decir que no les alcancen los números, no la tienen segura, como el caso de Juanita Alonso, en Cozumel, o Emir Bellos, en Lázaro Cárdenas.
En reunión privada, los líderes morenistas dejaron muy claro hoy que los que se quieran reelegir pueden hacer el intento, pero si no les favorecen las encuestas, van a ser los que sí salgan favorecidos por el pueblo.
Las encuestas, señalaron, sí serán de verdad y serán la plataforma para que Morena seleccione a sus mejores mujeres y hombres ante el Frente Amplio, que no es flanecito en todos los municipios del estado.
Y esta instrucción fue avalada por la gobernadora Mara Lezama.
Más claro, ni el agua: Se harán encuestas y los mejor posicionados serán los candidatos.