CIUDAD DE MÉXICO.- Adán Augusto López Hernández, aspirante a la candidatura de Morena para la lucha por la Presidencia de la República, admite que en la línea de salida lleva ventaja: “La Secretaría de Gobernación te da un plus” y desenvaina las ideas, delinea su perfil: “Será el tiempo de un presidente que consolide la transformación, que venga de un proceso de evolución dentro de la 4T. Son tiempos inéditos, de consolidar la 4T. Morena tendrá larga vida en el país”.
Metido en la arena de la disputa política, el aspirante dispara el arpón con la conciencia clara de que dará en el blanco: “Hay, dentro del movimiento (Morena), quienes no alcanzan a entender la dimensión de esta etapa de transformación, y que no entienden que este movimiento tiene un liderazgo en la figura de Andrés Manuel López Obrador, que no se hizo para mantener contento a Adán o a Pedro o a José… o a Rebeca, es para generar condiciones de cambio”.
–Decía un santo que si la fortaleza está bajo asedio, cualquier disidencia es traición, ¿así debemos entenderlo?
“No, no lo dijo un santo, es un salmo de la Biblia que habla de eso.”
–¿Percibe, aunque sea un tufo, un olor a traición dentro de Morena?
“No, yo no hablo de traición, hablo de que hay intereses también dentro de algunos compañeros muy particulares, y pues es la naturaleza humana, y la ambición en todos los parámetros.
“No diría que hay traición ni percibo ese tufo a traición, pero sí percibo posturas muy personales que pueden, sí, terminar intentando dañar al movimiento, pero yo creo que no lo van a conseguir, porque este movimiento no es monopolio de nadie.
“Este movimiento tiene un líder indiscutible que es al que tenemos que apoyar y que es el que cuenta con el apoyo abrumador de la mayoría de los mexicanos. Pretender que cualquiera de nosotros va a estar a la altura del liderazgo, del compromiso, de la imaginación echa política pública del Presidente, es equivocarnos, darnos contra la pared. Solitos no somos nadie, juntos es que somos, eso lo deberíamos entender todos.”
El secretario de Gobernación condiciona la entrevista, quiere que se realice fuera de la solemnidad de una oficina, y propone una caminata por la Alameda, pero accede a sentarse en una mesa a tomar café. “No acostumbro a dar entrevistas y esta es la primera a un medio escrito: La Jornada”.
–No se sabe mucho de Adán Augusto López, sin embargo tiene una larga carrera dentro de la política que inició apenas pasados los 20 años en Tabasco, y ha fungido como gobernador, senador y diputado. ¿Eso le alcanza para pretender llegar a la Presidencia de la República?
“Admito que muchos no me conocen fuera de Tabasco, pero no quiere decir que sea un improvisado. Soy gente del movimiento, soy, desde luego, fundador, y estoy comprometido con todo lo que representa.”
–Los rumores hablan de que fue el mismo Andrés Manuel López Obrador quien lo invitó a entrar en la disputa por la candidatura. Sáqueme de dudas. ¿Usted se acercó al Presidente para decirle que tiene aspiraciones o él lo invitó, lo destapó? ¿Cómo fue?
“Bueno, pues evidentemente el secretario de Gobernación platica con el Presidente de muchas cosas, de política interna, de gobernabilidad, y pues él conoce mi compromiso con él antes que nada, y las cosas se ha ido dando de manera natural.”
–Le dijo, como se dice en Tabasco, que si iba usted a querer…
“¿Vas a querer o no vas a querer? –corrige–. No, pues hemos estado conversando y en esa cotidianidad hemos comentado la posibilidad de aspirar a la candidatura.”
–Esto es muy interesante porque desde Luis Echeverría, hace casi medio siglo, ningún secretario de Gobernación ha llegado a la Presidencia de la República. ¿Se podría decir que entonces hubo un rompimiento?, ¿llegaron los tecnócratas y se fueron los políticos?
“Yo diría que ahora es el tiempo de un presidente de la transformación, que consolide la transformación, digamos que viene de un proceso, de una evolución dentro de la Cuarta Transformación, y eso significa pues consolidar todo lo avanzado. Nadie va a detener esta transformación ni su evolución, por eso el Presidente habla de un relevo generacional.”
Diálogo e interlocución
–Se supone que los secretarios de Gobernación llevan ventaja. Ejercen algún control sobre los gobernadores, por ejemplo. ¿Es así?
“Bueno, yo creo que esa es la visión de un país que ya no existe. Este es un gobierno distinto, donde se privilegia el diálogo político. Me toca hacer la tarea de interlocución con los titulares de los poderes, con diputados, senadores, con gobernadores, presidentes municipales, con líderes empresariales, con organizaciones sociales. La Secretaría de Gobernación te da un plus, que es ese conocimiento exacto de la situación que está viviendo el país, pero yo no puedo distraerme. Yo voy a privilegiar siempre que a este gobierno le vaya bien.”
El aspirante tabasqueño camina sin cuidado por la afilada hoja de la crítica y sentencia: “El Presidente va a estar presente, aunque no esté en las boletas, en la próxima elección y va a ser el referente de la política nacional durante muchos años más. No se equivoquen.
“Andrés Manuel va a estar, él es el creador de este movimiento, es el origen y es el destino. Yo difiero de los compañeros que dicen: ‘hay que aplicarnos porque ya no va a estar en la boleta’, pero claro que va a estar, sin estarlo.
“Y nuestra tarea, de quienes estamos preparándonos para el relevo generacional, pues tiene que ser de consolidación de lo mucho que se ha hecho, de consolidar la transformación. Yo habló de evolución dentro de la transformación, pero evolución significa ir hacia adelante, ir consolidando, ir fortaleciendo lo que se ha hecho, por eso, si cuidamos todos a Morena, el movimiento tendrá larga vida en el país.”
–A ver secretario, usted nos habla de que la 4T cambió al país, ¿es otro país, con la misma violencia que traíamos desde hace mucho? ¿Cómo se puede hablar de un nuevo país cuando tener problemas que…?
“Bueno, la violencia, efectivamente, no surgió por generación espontánea, la violencia en parte es el resultado de tanto años de desigualdad, de abandono, de connivencia entre el gobierno y los criminales.
“Esto ha cambiado, hay incidencia delincuencial contra la que estamos luchando todos los días. No es fácil la batalla, pero se va a ganar, paulatinamente como ha venido sucediendo a lo largo de este gobierno, sobre todo porque el Presidente tomó la decisión de ir a atender las causas, no los efectos.”
El café se acaba, pero la intención es continuar la plática. No quita el dedo del renglón y nos invita a caminar por Francisco I. Madero, la calle peatonal que va de Eje Central a Palacio Nacional. La gente lo ve y cuchichea, sonríe sorprendida. “Sí, sí es él, el secretario de Gobernación”. Una mujer pasa a su lado y sin fijar la vista le espeta: “Cuidado con los reclusorios, están matando a los jóvenes”, y un momento después un hombre que se dice piloto aviador retirado se le acerca y le confiesa que está desempleado.
Frente a nosotros, Palacio Nacional. Adán Augusto frena la caminata y acepta la pregunta: ¿Y su relación con los medios?
“Ni me ocupan ni me preocupan, no tienen por dónde seguirnos atacando. Los tiempos de aquella relación perversa entre los medios y el gobierno ya cambiaron. Este es otro país y los medios de comunicación tienen todo nuestro respeto, por lo demás, uno se va acostumbrando también a los ataques.”
Y al final, la fórmula de campaña, de gobierno. “Inteligencia, paciencia y prudencia”, pero además advierte que el Presidente “va a entregar una transformación prácticamente consolidada, y que tocará ir perfeccionado algunas pequeñas cosas, pero continuando con el proceso de transformación, ese nadie lo va a parar”.
Con información de La Jornada