La presidente municipal de Benito Juárez, Ana Patricia Peralta, no cuenta con bono democrático, lo cual implica un inicio complicado frente a los ciudadanos.
Y Cancun, que es una ciudad incontenible, exige respuestas oportunas y eficientes.
La Edil, del PVEM, no llegó vía una elección directa, por lo cual no cuenta con lo que se le llama “el bono democrático”, de tal forma que su legitimización está desde ahora bajo la lupa ciudadana
Pero, a Ana Paty se le empieza acumular la “carga” de estar al frente de una ciudad tan demandante como Cancún.
El asunto urgente es el relleno sanitario, que no sólo está fuera de control, sino que además presenta fisuras. Se trata casi de una emergencia ambiental, pero el Ayuntamiento verdi-granate de Cancún no parece ser relevante.
Tampoco, se ven acciones frontales ante el conflicto del transporte, en una pugna en la que los taxistas son los “malos de la película” y en la que los más perjudicados son los usuarios, (casi todos trabajadores) que deben de ver cómo se las arreglan para llegar a sus casas después de las 22 horas.
Y están los problemas de toooodos los días: la corrupción policiaca, la invasiones de espacios públicos, las inundaciones, etc.…
Ha trascendido que Ana Paty va para la reelección, pero ya estaría corriendo aquella de “lo que mal empieza…”