Agencias
PLAYA DEL CARMEN.- Personal de la Fiscalía General del Estado retiró esta madrugada los sellos de aseguramiento que tenía el extinto “Ice Cream Bar” desde hace tres años, pero no para devolver el predio a su posesionario, sino para cederlo a otro particular, que de inmediato trajo a trabajadores para demoler este local, ubicado en el Kilómetro 7 de la carretera a Boca Paila, conocida como la zona costera de este municipio.
Este local, que era trabajado por Rodolfo Cruz Ramírez desde hacía 14 años, fue asegurado por la Fiscalía, en enero de 2021, luego que un hombre fuera lesionado de bala en el lugar.
Lo usual es que el lugar permanezca con sellos en tanto se recaban evidencias y efectúan investigaciones, para luego regresarlo a su propietario; sin embargo, al tratarse de un predio en litigio, los agentes al parecer vieron la oportunidad de efectuar un despojo y aprovechar la falta de certeza legal para rehusar la entrega del terreno.
La Fiscalía General del Estado alegó que tenía una denuncia por la supuesta venta de estupefacientes en el lugar, y presentó como hallazgo una bolsita con presunta marihuana, que alegó haber hallado en el bar, durante su revisión.
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Rodolfo Cruz vio con impotencia cómo el aseguramiento se prolongó por meses. De forma inaudita, en el lugar se instalaron efectivos de la Guardia Nacional, quienes por cerca de un año usaron el lugar como base de operaciones, privándolo de su propiedad y fuente de ingresos. Después de un año, la carpeta por el supuesto narcomenudeo en el lugar fue descartado, pero en su lugar se abrieron otras carpetas.
Fue hasta esta madrugada, después de casi dos años y medio de espera, que los sellos fueron retirados por personal de la Fiscalía, pero para entregar este predio a un tercero, interrumpiendo una posesión de ya 16 años y consumando un despojo, sin que medie una sentencia de juez, denunció hoy Rodolfo Cruz.
Agentes de la Fiscalía
Ya de día, agentes de la Fiscalía General del Estado observaba desde dentro de un automóvil estacionado en el lugar, cómo trabajadores de la construcción ingresaban al sitio y comenzaban labores de demolición de lo que fue este bar.
En entrevista, el posesionario del predio criticó que los agentes se negaban a identificarse o brindarle cualquier información sobre lo que ocurría. Los trabajadores, en tanto, solo indicaban que seguían órdenes.
Los agentes igualmente se escondieron dentro del vehículo, al querer este reportero entrevistarlos. A cierta distancia, un segundo vehículo, sin placas, observaba igualmente lo que ocurría. Su conductor comenzó a grabar a quien esto escribe.
Rodolfo Cruz Ramírez señaló que él ya tiene denuncias penales interpuestas ante la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción, pero hasta ahora no ha visto mucho avance en esa carpeta.
Su caso no sería el único en la zona costera de Tulum, en donde muchos predios tienen doble titulación, a través del Ejido y a través del régimen particular. Administradores del bar Pez Vela también vieron cómo un operativo por búsqueda de droga, en 2021 derivó en un aseguramiento que se prolongó por meses, presuntamente por intereses de la contraparte del litigio que tenía la propiedad.
Con información de SIM
