REDACCIÓN /NOTICARIBE PENINSULAR
CIUDAD DE MÉXICO.-A pesar de la lluvia de amparos, el Tren Maya va, sentenció hoy el presidente Andrés Manuel López Obrador, durante su conferencia matutina.
Un juez de distrito con sede en Yucatán concedió ayer una nueva suspensión provisional a la Asociación Defendiendo el Derecho a un Medio Ambiente Sano AC, con sede en Cancún, que paraliza por el momento las obras de construcción del Tramo 5 de la obra (Cancún-Tulum).
“Vamos a enfrentar a estos grupos de intereses creados, a sus voceros y achichincles, pero el tren va”, aseveró el mandatario, quien se dijo cada vez más convencido que “seudoaambientalistas” opositores a la obra –de poco más de mil 550 kilómetros de longitud y que conectará cinco estados del sureste— “son unos farsantes”.
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Manifestó confianza en que el proyecto continúe pues, en primer lugar la parte imputada es el Tramo 5, “donde está el dinero (…) Ya sabíamos, que había mucho tiburón por acá”, pues se ubican compañías que, dijo, han dañado el medio ambiente como Grupo Xcaret y Calizas Industriales del Carmen (Calica), filial de la estadunidense Legacy Vulcan.
Y en segundo porque también durante el diseño y construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles se tramitaron decenas de amparos y finalmente la terminal aérea se confluyó y ya opera.
Quienes han tramitado los amparos contra el Tren Maya “no son los propietarios, no son los campesinos, no son los ejidatarios, no son pequeños propietarios, son seudoambientalistas, cada vez estoy más convencido de que son unos farsantes. Mañana o pasado vamos a hablar de eso a fondo. Porque es increíble la destrucción del medio ambiente, ahí donde ellos se están oponiendo al Tren Maya. Increíble, nada más que esa destrucción la están llevando a cabo empresas muy poderosas, acostumbradas a cooptar a todo el que se deja”.
Interrogado sobre el acuerdo que suscribió y que se publicó en el Diario Oficial de la Federación a finales del año pasado para avanzar en la construcción del Tren Maya, López Obrador remarcó que lo hizo a fin de avanzar en la obra, pues sus opositores desean que su gobierno no cumpla las metas.
“Ellos lo que quiere es que no hagamos nada. No me estoy chupando el dedo. Entonces si no emito el acuerdo, pues nos paran por completo. Eso es lo que ellos quieren, a ellos no les importa que se quede inversión tirada, que es dinero del pueblo. Yo tengo que cuidar eso, para eso me eligieron, para defender los intereses del pueblo. Dicen: ‘es que no hay permiso’. La famosa MIA (manifestación de impacto ambiental), parte del acuerdo fue para que se tuviese el tiempo y se tuvieran bien las cosas porque nadie quiere destruir el medio ambiente, a lo mejor ellos sí, pero nosotros llevamos años luchando por la naturaleza, luchando por las causas justas, luchando por la justicia, y ese acuerdo está validado por la autoridad judicial, por la Suprema Corte (de Justicia de la Nación), es legal”.
Con información de La Jornada