Al interior de los comités de salud están realmente preocupados, ante el crecimiento de los contagios por COVID-19.
La falta de equipo no es la única preocupación. Los protocolos son un desastre y la burocracia es de terror. Por ejemplo, las pruebas son revisadas en Chetumal.
La capacidad de respuesta es pasmosa.
Pero, además se señala que se están maquillando las estadísticas. La salida es decir que son casos de “neumonía”. Pero, hasta ante este “recurso” hay problemas. Las cifras son contradictorias. Se llegó a “filtrar” que hubo nueve decesos la semana pasada, pero también se menciona que “sólo” fueron tres.
Por lo pronto, es evidente que se requiere mayor transparencia y certeza.